El drenaje linfático es una excelente solución para evitar la retención de líquidos o para eliminar toxinas del organismo. Mejora el estado de salud en general, con resultados visibles en poco tiempo. Te contamos todo lo que debes saber sobre esta técnica saludable y estética.
¿Qué es el Drenaje Linfático?
El drenaje linfático es una técnica manual desarrollada hace poco más de 100 años, que estimula los ganglios linfáticos distribuidos a través del cuerpo para mejorar la circulación de la linfa. Actualmente, existen aparatos especialmente diseñados para simular la presión de las manos a través de la compresión de aire.
Por medio de la aplicación de movimientos muy suaves y constantes, se puede lograr estimular la circulación de la linfa para atacar la retención de líquido, inflamaciones o para acelerar la pérdida de toxinas en el organismo. Cada vez más centros estéticos ofrecen el drenaje linfático como tratamiento de salud y belleza.
¿Para qué sirve el Drenaje Linfático?
El sistema linfático trabaja en correlación con el sistema inmunológico. Como consecuencia se obtienen beneficios generales al activar el sistema inmunitario. Además es una técnica recomendada en cuadros de retención de líquidos, inflamaciones o dolor crónico.
El drenaje linfático también es eficaz para reducir la celulitis, disminuir la grasa corporal focalizada, mejorar la textura de la piel, combatir el estrés y evitar las molestias causadas por varices en las piernas. Su aplicación práctica puede servir para tratar diferentes condiciones.
También te puede interesar …
Dermoabrasión facial
Lipoescultura
Ácido Hialurónico en Labios
¿Cómo se realiza un Drenaje Linfático?
Un drenaje linfático se lleva a cabo por medio de movimientos suaves, constantes y lentos de las manos sobre la piel para estimular directamente los ganglios linfáticos. Esta técnica solo debe ser realizada por fisioterapeutas experimentados o por especialistas, ya que conocen con precisión los movimientos a aplicar en cada zona según el problema a tratar.
Existen algunos aparatos especialmente diseñados para la realización de drenajes linfáticos. Estos, por medio de la acción mecánica y de succión simulan el movimiento de las manos para lograr la fluidez de la linfa. Una sesión de drenaje linfático dura una hora de media.
Beneficios del Drenaje Linfático
Algunos de los beneficios más destacados que se obtienen son:
- Mejora la circulación sanguínea. Los movimientos constantes en distintas áreas del cuerpo ayudan a reactivar la circulación.
- Depura al organismo de toxinas. Gracias a una mejor fluidez de la linfa, se expulsan las toxinas y desechos del organismo fácilmente.
- Reduce la celulitis. Los lentos movimientos sirven para reducir la celulitis en glúteos y piernas al redistribuir el tejido graso.
- Mejora la textura de la piel. La presión manual de las manos sobre la piel utilizando aceites u óleos, mejora la textura de la piel.
Estos son sólo algunos de los beneficios de someterse a un drenaje linfático. Para más información acude siempre a un profesional médico o fisioterapeuta de confianza.